¿A qué costo para ‘mejorar’?
“Hay dos tipos de corrupción: Una cuando el pueblo no obedece las leyes.
Y otra cuando las leyes se corrompen”
Montesquieu
Cuba, otoño 2017. Con el devenir de los cambios en una Cuba nueva, más integrada al mundo globalizado de hoy, acorde a los vaivenes del mercado mundial. Adaptarse a esto puede ser algo nuevo para los dirigentes de esta sociedad. Y siempre lo nuevo suele interpretarse como «peligroso», pero ¿para quién?
Los ‘cambios’ no… el perfeccionamiento… ¡No! (terminologías ya malgastadas), la actualización del modelo económico cubano para hacer la economía de esta isla mejor. Y así llevar adelante la obra de la Revolución con el fin de perpetuarla más allá de los tiempos. La promesa de que ahora se mira el camino a futuro con la certeza de que se logrará. Ya expira todo sueño de que se logre. Estos capítulos ya se han vivido muchas veces. Y aún estamos cambiando lo que hacía seis meses estaba ya «perfeccionado». La sola idea de pensar en los miles de millones de combinaciones y probabilidades de que algo salga tal cual está pensado. Y siempre la práctica sopesa cualquier virtuoso equipo de legisladores para hacerlas pasar como inadecuadas.
He sido muy abstracto, pero lo que comenzó como una idea para lograr un sueño se convirtió en pesadilla. Todo problema tiene una raíz social, política y económica también. Cuando un gobierno en pos de «lo mejor» realiza sus acciones para ello y las mismas se alejan por mucho de lo que su sociedad requiere. Ahí nacen los problemas en las distancias. Las ineludibles discrepancias entre el Estado (que debe representar al pueblo) y el propio pueblo.
Pero a lo que vamos.
Causa y efecto
En determinamos momentos de la historia actual de Cuba se ha querido enrumbar definitivamente esta isla al desarrollo. Empero a las objetivas dificultades ya mencionadas (más bien gastadas) sobre el Embargo de EE.UU. que tuvo su momento de ablandamiento, y ahora vuelve a los momentos de la «Guerra Fría».
En la enrevesada estructura del gobierno cubano, fundo su origen político en la figura del «Cuadro». Por lo general son líderes formados y comprobados en la jerarquía del Partido Comunista de Cuba (P.C.C.); en los cuales recayó la responsabilidad y confianza en dirigir empresas y estratos ministeriales del país. Todos actualmente en descrédito, pues se ha demostrado, no en pocas ocasiones, que suelen ser sujetos con determinada sensibilidad a corromperse. No se podría comprender mejor el sistema sin notar algunos ejemplares líderes muy rectos en su labor encarcelados por «tráfico de influencias»1. Por no dejar de lado la creación de una institución, años atrás, que regularía a un nivel superior a los ministerios. Con el fin de fiscalizar cada acción o decisión de un directivo y su respectiva legalidad en los procesos: La Contraloría General de la República.
Algo cambió.
Los esfuerzos por controlar tanto desorden en el país. Primando en los que suponen deben ser el ejemplo de toda la sociedad. Va creando la desidia y el desamparo popular. La Sociedad es reflejo del actuar de su gobierno, y si para él aplican como insignificantes asuntos acuciantes, en pos de un «bien mayor». También al asumir la política de haz lo que digo no lo que hago. Lo que hago se distancia de lo públicamente esta exhibido, y no coincido con mi imagen política.
Cambio de Poder ¿cambio de estructura?
Con la renuncia del líder de la Revolución por problemas serios de salud a la Presidencia de Cuba. Se orientó tal puesto hacia su hermano menor, y seguidor de toda la vida, en la sucesión del poder tal cual dinastía cualquiera. No se engañen todo estaba (pre) establecido.
Ahora la nueva Presidencia tendría que armar un gabinete. Aún se comenta que sucedió un Golpe de Estado silencioso. Entonces el aparato gubernativo se incluyó (y preponderó) con militantes provenientes de las filas del ejército.
Ahí comenzó el éxodo de las filas del Ministerio de las Fuerzas Armadas (MINFAR) a expandirse hacía la economía nacional. Empezó con una incipiente empresa con el fin de recaudar algo de la precisada moneda libremente convertible (M.L.C.) para la manutención del ejército. Aclaro el cambio o el movimiento esto no implicó desligarse totalmente de su origen.
Entonces nos vemos rodeados de Coroneles y Generales dirigiendo en la vida civil tal cual cuartel una empresa. Incluso estratos ministeriales muy ajenos al MINFAR. Es evidente donde recae hoy en día la confianza de nuestros dirigentes. Y aunque veamos en imágenes televisivas un diverso Consejo de Estado. No se engañen fácilmente, cada vez veremos más colores verde olivo en el mismo. Incluso más allá de la portada que intentan refrendar.
Vamos a los datos:
62% de la estructura económica vinculada a la recaudación de divisas está ligada al MINFAR.
78% del llamado sector del turismo responde no al MINTUR sino al MINFAR.
6 corporaciones nacionales absorbidas, responden al aparato empresarial del MINFAR.
La única empresa de telecomunicaciones del país, ETECSA, está en trámites de ser gestionado.
Captan personal desde los estudios secundarios, para propiciar cubrir sus plazas más vacantes, generalmente en el área económica.
Resumiendo, al borde de vivir actualmente está Cuba en un país enteramente militarizado.
1 Término tipificado en el Código Penal de la República de Cuba.
Este escrito ha sido enviado por KATUN, seudónimo de un ciudadano que vive en Cuba
https://www.meditacionmusica.com/militur-la-militarizacion-la-economia-costo-mejorar-escrito-enviado-katun/
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